domingo, 29 de enero de 2017

Revelan precariedades en hospital municipal de Guerra

Una de las áreas que peor estado evidencia es la sala de emergencias

Yelissa Rosario. Hoy 

San Antonio de Guerra, provincia Santo Domingo.- A tres años de que se iniciara la intervención del hospital municipal de San Antonio de Guerra “Elvira Echavarría”, los avances en los trabajos que buscaban modernizar el deprimido centro de salud, apenas llegan al 15 por ciento. 

El proyecto, que contempla la construcción de una amplia y moderna emergencia y el reacondicionamiento de las habitaciones, reconstrucción de quirófanos y otras áreas, lleva cerca de un año paralizado. 

En la actualidad al centro de salud, que debe dar respuesta a unos 56 mil habitantes, a penas se ha reparado el techo y se hizo entrega de un diminuto laboratorio. 
El hospital es uno de los 56 que fueron intervenidos a nivel nacional, y debido a los trabajos de remodelación fueron dejadas fuera de servicio casi la mitad de las camas para internamiento que tenía disponible el centro sanitario. De 40 se redujeron a 28, pero a pesar de ésto su director, el doctor Omar Marte, dice que la situación es manejable.

Dice que se esperaba que con el traspaso del remozamiento del Ministerio de Salud Pública a la Oficina de Ingenieros Supervisores de Obras del Estado (Oisoe), los trabajos avanzarían y la esperanza era que a más tardar en un año estuvieran concluidos, pero no ha sido así.  De hecho, las remodelaciones han quedado justo en el nivel donde fueron dejadas por Salud Pública.
De la readecuación de las habitaciones que pasarían a ser privadas y semiprivadas, climatizadas, con gas por tuberías, sólo los baños han sido avanzados en algunas. 

Emergencia en emergencia
Una de las áreas que peor estado evidencia es la sala de emergencias. Además de lo limitado de los cubículos, sólo cuatro, que obliga a que los pacientes una vez medicados deban esperar en el pasillo, pareciera un hospital de tiempos remotos, que carece de utensilios y con apariencia descuidada.
De acuerdo al director, en ese centro se recibe un promedio de cien pacientes en emergencia, igual número para las consultas.  Aunque lo que está proyectado es una área de urgencias modernas, dividas en pediátrica, ginecología y obstetricia, una general, de trauma shock y un espacio para triage (clasificación del paciente según la urgencia), de eso sólo están los planos, pues si bien el centro tiene el terreno para expandirse, ni siquiera se ha trabajado en la remoción del mismo.

Pero según lo que cuenta el doctor Marte, los trabajos se detuvieron mientras se esperaba que aprobaran los planos para los gases, que llegaran a cada habitación por tuberías, pero ya tienen el visto bueno. La promesa es que en enero se reinicien los trabajos.
Pese a esas limitaciones el doctor asegura que el hospital funciona, sin mayores contratiempos y así se observó.

No pueden facturar
Sin embargo, lo que preocupa al doctor Omar Marte es que por las condiciones actuales y deficiencias del hospital, único en la zona, no pueden cobrar los servicios a las personas con seguro privado, ya que las aseguradoras, al no cumplir con ciertos requisitos no le han asignado un código para poder facturar. 

Esto es peor con la deficiente partida económica que dice recibe como subvención. Un poco más de medio millón mensualmente, cuando un hospital de esa categoría necesita de al menos 1 millón 200 mil pesos.

De ese estimado mensual, Promese se queda con cerca del 40 por ciento por concepto de medicamentos, por lo que el neto del hospital para personal operativo, alimentos, otros medicamentos es de 379 mil pesos. 

Hacen malabares
Esa limitada ración económica que se suple obliga a la administración del centro a hacer malabares para poder dar el servicio a la población, según declara el director.


No hay comentarios.:

Publicar un comentario